Hay momentos que marcan las diferentes etapas de nuestras vidas, ya sea aprobar el examen de conducir, conseguir tu primer empleo o celebrar el aniversario de boda. Del mismo modo, hay procedimientos de cirugía plástica que son populares en determinadas décadas de la vida de una persona. Echemos un vistazo a algunas de las mejores edades para someterse a una plastia:
A los 20 años: Mamoplastia
El aumento de senos o mamoplastia sigue siendo una de las cirugías plásticas más habituales en el mundo, y es la más solicitada por mujeres en la veintena que buscan equilibrar las proporciones de su cuerpo adulto o aumentar su confianza. En la consulta de un cirujano plástico certificado, las mujeres determinan el tamaño y tipo de implante que puede ayudarlas a lograr su objetivo.
Aunque las mujeres de 20 años constituyen el segmento más grande de pacientes que se someten a un realce mamario, no existe un límite de edad para el procedimiento, que a decir verdad sigue siendo muy popular también para aquellas de entre 30 y 50 años. El criterio más importante para hacerse una mamoplastia es estar en buen estado de salud, no un rango de edad específico.
A los 30 años: Liposucción
A medida que envejecemos, nuestro metabolismo se ralentiza. Por muchos esfuerzos que realicemos, nuestra silueta no luce tan estilizada como antes. Las bolsas de grasa persistentes que son resistentes a la dieta y al ejercicio se adhieren a varias partes del cuerpo. La liposucción es una solución ideal para muchos hombres y mujeres de más de 30 años que buscan refinar sus contornos. Esta plastia de remodelación se adapta a las necesidades individuales, redefiniendo áreas específicas del cuerpo.
A los 40 años: Cirugía de párpados y cejas
El proceso de envejecimiento se caracteriza, en parte, por una producción reducida de colágeno, el ingrediente que da a la piel su elasticidad. A partir de los 40 años, el envejecimiento se manifiesta por primera vez en la parte superior del rostro. La piel que rodea el ojo empieza a mostrar arrugas permanentes y la frente y los párpados superiores pueden comenzar a caerse.
Las cirugías de párpados, también conocida como Blefaroplastia, y la de levantamiento de cejas (Cejaplastia) son cirugías plásticas muy populares y apropiadas para personas de 40 años que desean rejuvenecer su apariencia y lucir más frescas. Para un enfoque no quirúrgico, el Botox es ideal para suavizar las patas de gallo y las líneas del entrecejo a partir de los 40 años.
A los 50 y 60 años: Estiramientos faciales
A medida que nos acercamos a la edad de jubilación, a menudo parecemos más mayores de lo que nos sentimos, y los efectos más obvios del envejecimiento son ahora claramente visibles en nuestros rostros. Al llegar a los 50 y 60 años, hemos perdido nuestros contornos juveniles, tenemos las comisuras de los labios caídas, se han formado pliegues faciales profundos, la línea de la mandíbula pierde firmeza y en el cuello puede aparecer un doble mentón. Las mejillas hundidas son el resultado de la pérdida de volumen facial que también ocurre con el tiempo.
Ningún estilo de vida saludable puede prevenir la evidencia del paso del tiempo, lo que lleva a muchas personas de 55 años en adelante a someterse a un estiramiento facial o ritidoplastia. El lifting corrige principalmente los signos de envejecimiento en la parte inferior de la cara y la parte superior del cuello, pero puede realizarse junto con una blefaroplastia o cejaplastia.
Independientemente del grupo de edad, la cirugía estética en su conjunto sigue creciendo en popularidad. Cómo nos sentimos es algo que nos afecta, y la cirugía plástica ayuda a mejorar la apariencia natural para que disfrutes de una imagen positiva de ti misma … No importa cuántas velas hayas soplado en tu último pastel de cumpleaños.
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