La pandemia del coronavirus ha golpeado con fuerza a la mayoría de sectores de la sociedad. En el caso de la medicina y cirugía, tanto privada como pública, hemos visto cómo la práctica totalidad de recursos existentes han ido destinados a la atención de pacientes afectados por coronavirus. Esto ha provocado la suspensión de la gran mayoría de consultas médicas presenciales y de la totalidad de cirugía programada no urgente.
En el caso de la blefaroplastia, encontramos por un lado que muchos pacientes que tenían su cirugía programada para estos meses deseaban seguir adelante con su blefaroplastia ya que el confinamiento era un buen momento para ellos para hacer la recuperación de blefaroplastia post operatorio, pero no ha sido posible. Por otro lado, otros pacientes han decidido esperar y buscar un momento más propicio para operarse.
El progresivo levantamiento del confinamiento que estamos viviendo hace que empecemos a estar disponibles para realizar nuestras cirugías y tratamientos habituales. Deseamos reanudar nuestra actividad con la máxima seguridad. Para ello dispondremos de las medidas necesarias de distanciamiento, higiene y de los equipos de protección individual. Además, se solicitará al paciente uno de los dos test disponibles para coronavirus y daremos indicaciones al paciente acerca de donde realizárselo. Si el paciente dispone de un test de serología con resultado positivo, es decir con IgG positivo, eso será suficiente. Si no es el caso, recomendaremos al paciente hacer un test de PCR en los 3 días previos a la cirugía. Esto nos aportará la máxima seguridad, a personal médico y pacientes.
En resumen, estamos en condiciones de reanudar progresivamente nuestra actividad dentro de un protocolo COVID- FREE. Nos adaptamos a la nueva normalidad para seguir ofreciendo nuestro servicio de cirugía de párpados con la máxima seguridad.La cirugía de blefaroplastia durante la crisis.