A menudo hay detalles de nuestro cuerpo que no nos llegan a llenar del todo, pero debemos ser conscientes de que eso es algo que ocurre a todas y cada una de las personas que nos rodean. Sin embargo, en nuestro caso tenemos la oportunidad de cambiar y dejar atrás esos complejos que han estado durante tanto tiempo a nuestro lado.
No hay ningún ser humano perfecto, eso está claro, y de ahí que todos y cada uno de nosotros tengamos aspectos de nuestro cuerpo que no nos llegan a gustar del todo y que, incluso, nos pueden suponer un complejo que puede llegar a afectarnos emocionalmente. Por ello, la cirugía plástica y el aumento de pechos no es un proceso meramente estético, sino que además también conlleva un importante componente emocional que vale la pena considerar a la hora de tomar una decisión acerca de someternos o no al procedimiento.
Un pecho pequeño puede causar problemas emocionales
El aumento de pechos es una de las cirugías plásticas más demandadas en la actualidad, y es que hay que tener en cuenta que tiene un componente emocional muy importante que vale la pena valorar a la hora de tomar una decisión acerca de si es viable o no llevar a cabo la operación.
En muchos países, operarse el pecho se ha convertido en algo casi obligatorio para la mayoría de chicas jóvenes, las cuales buscan un busto más voluptuoso para poder satisfacer sus necesidades de mantenerse dentro del ámbito de la moda y del concepto de estética que prima en la actualidad.
Sin embargo, en la mayor parte de los casos, recurrir a este tipo de cirugía se deben a que existe un complejo debido al tamaño de los senos, lo cual evidentemente puede acabar acarreando importantes problemas emocionales.
Debemos recordar que una persona que no se siente bien consigo misma, automáticamente empieza a perder una parte de su autoestima, lo cual con el paso del tiempo puede llegar incluso a degenerar y convertirse en problemas que afectan a su vida diaria ya su capacidad para relacionarse con el entorno.
Por esa razón, si nos encontramos ante una situación similar, es importante que valoremos a la paciente de forma individual, estudiando si realmente va a conseguir una mejora en su calidad de vida a través de la realización de este tipo de cirugía.
Los distintos tratamientos de cirugía mamaria a los que te puedes someter
Pero es básico tener en cuenta que no sólo podemos sentir complejo por el hecho de tener un pecho pequeño, sino que además hay otras muchas patologías que es importante tener en cuenta que disponen de remedio, y para ello os vamos a mostrar algunos de los tratamientos de cirugía mamaria más habituales a los que te vas a poder someter.
Eso sí, antes de ponernos en marcha, es esencial que nos aseguremos de que la persona que va a realizar el proceso cuenta con todas las garantías y conocimientos que le permitan realizar un buen resultado y con los mínimos riesgos, de manera que si queréis realizar un Aumento de Pechos en Mallorca, es esencial que os asesoren debidamente y estéis convencidas de que os encontráis en buenas manos.
Aumento de mama
Como decíamos, el aumento de mama es uno de los procesos a los que más habitualmente se recurre en estos casos, consiguiendo de esta forma disfrutar de un volumen más adecuado el cual deberá ir en consonancia con el resto de nuestro cuerpo, es decir, un buen profesional siempre hará todo lo posible por lograr un perfecto equilibrio físico.
Reducción mamaria
Por otra parte, también tenemos la reducción mamaria que es una de las más frecuentes junto con el aumento de mama. En este caso nos encontramos en la misma situación, es decir, una mujer que cuenta con unos pechos excesivamente grandes no sólo puede desarrollar complejos en este sentido, sino que además también puede llegar a afectar muy negativamente a su salud.
Dentro de la reducción mamaria podríamos también incluir un tipo de cirugía masculina que es la ginecomastia, que básicamente es reducir el tamaño de los pechos en aquellos hombres en los que están más desarrollados de la cuenta.
Elevación mamaria
La elevación mamaria es también un procedimiento frecuente, ya que hay que tener en cuenta que, con el paso del tiempo, los pechos van poco a poco cayendo por razones naturales, de manera que a través de un sencillo procedimiento también vamos a tener la posibilidad de conseguir devolver nuestros pechos a su sitio, con lo que por una parte vamos a conseguir una apariencia mucho más estética, mientras que además también cabe destacar que unos pechos elevados a su vez transmiten una mayor sensación de juventud.
Asimetría mamaria
También existe otro problema bastante habitual que es la asimetría mamaria. Evidentemente todas las personas presentamos asimetría en distintas partes de nuestro cuerpo, es decir, nuestros brazos no tienen exactamente el mismo largo, de la misma forma que nuestra cara tampoco es simétrica, y en general una mitad de nuestro cuerpo es diferente a la otra mitad.
De igual manera esto se presenta en los pechos. Sin embargo, en la mayoría de los casos esta asimetría es tan leve que prácticamente no se puede ver a simple vista, pero hay casos en los que es más marcada por lo que se debe proceder a realizar una corrección.
Mama tuberosa
En este caso hablamos de una malformación congénita en la que los pechos no se llegan a desarrollar, por lo que se quedan con un tamaño muy reducido mientras que la aureola del pezón suele tener un tamaño más grande de lo normal.
Hablamos de otra situación que también puede llegar a causar importantes problemas emocionales en la persona, de manera que solucionarlo supone una ventaja importante para su salud.
Reconstrucción mamaria y de pezón
Para poder corregir los efectos de determinadas enfermedades también vamos a tener la posibilidad de recurrir a la reconstrucción mamaria y reconstrucción de pezón, ambas alternativas esenciales con las que una persona puede llegar a recuperar su autoestima, mejorando así su salud y por supuesto también su felicidad.
Fuente: mallorcadiario.com