Los michelines en la espalda y los laterales son un problema estético cuando queremos lucir ropa ajustada o cuando toca ponerse ropa de baño. Por desgracia, a algunas personas en cuanto ganan unos kilos de más se les deposita la grasa en la cintura justo por encima de la cadera y en mitad de la espalda, lo bueno es que tiene solución.
A algunos pacientes el mero hecho de ponerse un pantalón, una falda o un sujetador mientras se ven en el espejo y comprueban cómo se forman esos antiestéticos rollitos o michelines en la espalda y la zona lumbar, les produce cierto malestar o desasosiego. Como es natural desearían que no estuvieran porque estropean su figura.
Mediante liposucción podemos quitar los michelines que afean la silueta. Se trata de aspirar poco a poco la grasa para esculpir su figura. De hecho también recibe el nombre de lipoescultura por esta razón, ya que vamos a extraer la grasa que le sobra y que no consigue eliminar.
Además puede que le interese saber que la grasa que vamos a extraer la podemos depurar y volver a inyectar en otra zona de su cuerpo. Por ejemplo para corregir algún defecto como las arrugas, ganando volumen o mejorando la forma.
La liposucción es una intervención de cirugía estética dirigida a personas con un peso relativamente normal que desean eliminar depósitos de grasa localizados. Por tanto, si tenemos un sobrepeso importante conviene perder algunos kilos mediante ejercicio y dieta saludable antes de someternos a una liposucción.
CÓMO ES LA LIPOSUCCIÓN DE MICHELINES EN LA ESPALDA
Con liposucción es fácil eliminar los michelines que aparecen en la espalda y los flancos. La técnica consiste básicamente en realizar pequeñas incisiones de unos 5 mm por donde vamos a introducir una cánula que puede ser de diferentes formas y diámetros. Dicha cánula va conectada a una máquina específica y el cirujano plástico la orienta con destreza para romper y extraer la grasa o tejido adiposo mediante aspiración, de ahí que también se denomine lipoaspiración.
Cualquier momento es bueno para realizar este tipo de liposucción, siempre que tenga un peso relativamente normal y no padezca de problemas cardíacos o respiratorios. También es importante que el paciente tenga una buena calidad de piel, es decir, que sea firme y elástica de modo que una vez extraída la grasa la zona adopte un aspecto normal. Si la piel le cuelga, es posible que el cirujano aconseje algún procedimiento adicional para eliminar el exceso de piel.
Si quiere hacer coincidir la intervención con unas vacaciones, tenga en cuenta que podrá volver a hacer vida normal entre siete y diez días después de la intervención. Los resultados que podemos esperar serán visibles a los dos meses y los definitivos en torno a los seis meses.
Fuente: doctormartinezgutierrez.com